Descubre el Budismo
¿Es el budismo una filosofía?
La palabra filosofía se compone de dos conceptos "filo" y "sofía", los que significan "amor" y "sabiduría". La filosofía es el amor a la sabiduría o amor y sabiduría. Ambas describen al budismo perfectamente.
El budismo enseña que debemos desarrollar nuestra capacidad intelectual hasta que podamos comprender nuestro universo claramente. También nos estimula a entregar amor y bondad a todos los seres, sin distinción. Así el budismo es una filosofía, pero no sólo una simple filosofía, es la filosofía suprema.
¿Quién fue Buda?
Corrían los años quinientos antes de Cristo, un hermoso joven, el príncipe Sidharta Gautama disfrutaba de los placeres que su padre, el rey, disponía para él. Los súbditos del pequeño villorio eran bellos y saludables. La comida, la música y el descanso eran abundantes. Sidharta no conocía el sufrimiento.Pero el inquieto joven ayudado por uno de sus sirvientes se escapó un día y cruzó los altos muros del colosal palacio. Allí se encontró de sopetón con la vejez, la enfermedad y la muerte. Profundamente conmovido, decidió buscar el camino hacia la felicidad humana.
¿Fue Buda un dios?
No, Buda no es un dios, nunca dijo serlo. Ni un dios, ni hijo de algún dios. Tampoco dijo ser algún enviado de un dios, ni profeta. Fue un hombre común perfectamente iluminado, Sólo enseñó su experiencia y nos instó a seguir su ejemplo. De acuerdo a sus enseñanzas y su experiencia, cualquiera de nosotros también podría llegar a ser como Buda.
¿Los budistas adoran ídolos?
No. Quien crea eso es por que desconoce del budismo. Una estatua de Buda rememora la dimensión humana de las enseñanzas budistas. Nos recuerda que nosotros podemos liberarnos del sufrimiento al igual que Buda, encontrando la felicidad en nosotros mismos. Las imágenes de Buda nos mantiene en mente esa preciosa oportunidad de trascender el sufrimiento y alcanzar la felicidad duradera. .
La expansión del Budismo en el mundo
A lo largo de su larga historia, el Budismo se extendió a todos los países de Asia. Allí donde aparecía, la interacción entre la cultura indígena local y las nuevas enseñanzas que provenían del Buda causaban profundos efectos en las dos. En muchos casos el Budismo dió lugar a un renacimiento cultural en estas culturas a las que llegaban. En algunas situaciones, como ocurrió en el Tibet, se convirtió incluso en heraldo de la cultura. A medida que el Budismo se extendía, experimentaba a su vez cambios y llegaba a adaptarse a las circunstancias culturales específicas de cada zona, esto para así poder expresar sus principios directamente. Así, actualmente distinguimos los budismos de Sri Lanka, Tailandia, Birmania, Vietnam, Camboya, Laos, Nepal, Tibet, China, Mongolia, Rusia y Japón (incluso algunos historiadores creen, a partir de recientes hallazgos arqueológicos importantes, que países de medio oriente tuvieron también en su historia un periodo budista), y dentro de estos podemos observar una amplia y desconcertante variedad de tradiciones, escuelas y subescuelas. La pregunta que surge es cuál, de entre todo este abanico, es el verdadero Budismo y a su vez qué tienen en común todos estos enfoques diferentes.